Un espacio para compartir ideas, imágenes, propuestas, versos y la esperanza de un mundo mejor... Tel. 849 637 3922.
domingo, julio 02, 2017
Artistas Unidos por un Planeta Posible recordando colectiva en Sabana Grande de Boya.
Un espacio para compartir los sueños y las esperanzas de juntos poder contruir un mundo mejor a través de la poesía.
viernes, junio 30, 2017
La mujer que puede detener a Trump
La mujer que puede detener a Trump
Recibidos
| x |
|
9:48 (hace 1 día)
| |||
|
|
Un espacio para compartir los sueños y las esperanzas de juntos poder contruir un mundo mejor a través de la poesía.
Israel destruye casas y esperanzas en Jerusalén
[alai-amlatina] Alainet.org Al Día - 30/06/17
Recibidos
| x |
|
17:25 (hace 19 horas)
| |||
|
- - - Servicio Informativo "Alai-amlatina" - - -
Agradecemos sus aportes económicos que permiten sostener este servicio: http://www.alainet.org/ donaciones
Agradecemos sus aportes económicos que permiten sostener este servicio: http://www.alainet.org/
Alainet.org Al Día - 30/06/17
Español:
- Bolivia: hegemonía y reacomodo estratégico
Los retrocesos políticos y económicos internos en Brasil y Argentina, la parálisis de los procesos de la integración latinoamericana emancipadora y las enérgicas operaciones del imperialismo y de las oligarquías locales hacia la recuperación de in Eduardo Paz Rada - Colombia La dejación de armas y la marcha del acuerdo final
Este martes 27 de junio de 2017 pasará a la historia política de Colombia como el día en que las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, FARC-EP, dieron realmente por terminado el levantamiento armado iniciado el 26 de mayo de 1964 en que un Pedro Santana Rodríguez - Ballena Azul: el juego de la reflexión social
Odiado por todos, el ruso Philipp Budeikin es considerado el virtuoso creador del juego “La Ballena Azul”, que utiliza la popularidad de las redes sociales en la Internet, para recrear un mundo que supera la violencia virtual de la World Wide Web, Carlos Ruperto Fermín - Paraguay El crecimiento económico paraguayo evaluado en términos cualitativos
Paraguay representa apenas el 0,46% del PIB latinoamericano y posee una población de menos de 7 millones de habitantes. La última tasa de crecimiento negativo en su PIB fue registrada en el año 2012. Ernesto Rodríguez Carámbula
- La Bolivia de Evo y de Álvaro
Emir Sader
- Israel destruye casas y esperanzas en Jerusalén
Nuria Pérez Cusó
Português:
English:
Français:
Te invitamos a sostener el trabajo de ALAI.
Contribuciones: http://alainet.org/donaciones. php
Mas informacion: http://alainet.org
FaceBook: http://facebook.com/America. Latina.en.Movimiento
Twitter: http://twitter.com/ALAIinfo
RSS: http://alainet.org/rss.phtml
______________________________ ________
Agencia Latinoamericana de Informacion
email: info@alainet.org
Suscripciones: http://listas.alainet.org/ listas/subscribe/alai-amlatina
Desuscripciones: http://listas.alainet.org/ listas/signoff/alai-amlatina
Contribuciones: http://alainet.org/donaciones.
Mas informacion: http://alainet.org
FaceBook: http://facebook.com/America.
Twitter: http://twitter.com/ALAIinfo
RSS: http://alainet.org/rss.phtml
______________________________
Agencia Latinoamericana de Informacion
email: info@alainet.org
Suscripciones: http://listas.alainet.org/
Desuscripciones: http://listas.alainet.org/
Un espacio para compartir los sueños y las esperanzas de juntos poder contruir un mundo mejor a través de la poesía.
jueves, junio 29, 2017
El sol empieza a acrisolar el horizonte
Ya son más de las cuatro de la tarde, el sol empieza a acrisolar el horizonte con sus rayos que se van atenuando con el paso de las horas vistiendo de colores las nubes que raudas se alejan, huyendo de las sombras.
Por el camino los labriegos regresan de sus conucos, sobre sus hombros cargan el peso amargo de la pobreza. La tierra con esta larga sequia es poco lo que da.
Regresan cansados con sus azadas al hombro, sus machetes en el cinto, con sus sombreros de paja, las camisas sudadas, los pantalones remangados y los pies descalzos.
Julio es un mes árido donde el calor que se eterniza más allá de las noches parece quemarlo todo, hasta los sueños.
Ya hace un rato que el tío Juan de la Rosa y el tío Alberto regresaron de más allá de las lejanas praderas del rocío, se alejaron tanto hacia el oeste buscando pastos que cruzaron las claras aguas de la cañada de Guajimía y llegaron a Manoguayabo, en donde el ganado comió hasta hartarse y después abrevó en las aguas del río Haina.
Son más de las siete de la noche imagino que ya el abuelo Ismael llegó a su casa, en el km7 de la carretera Sánchez, llevó a Julia donde pasa la noche, se dio un baño, cenó y luego como todas las noches se sentó bajo los limoncillos florecidos de sobras y estrellas, junto a Mimina, su esposa a ver como se alejan por la carretera Sánchez los pocos carros que pasan rumbo a Haina o San Cristóbal.
En la esperilla, los hombres después de darse un baño y comer algo se van juntando poco a poco en la pulpería de Andrés Longo a tomarse un trago, escuchar canciones en la vellonera y contarse viejas historias repetidas y carcomidas por el tiempo en donde olvidan lo amargo de sus vidas.
Es extraño pero Manuel hoy no ha dado señales de vida no se por donde andará mi solitario amigo.
Hace un rato la tía Eufemia que venía de Manganagua, pasó por casa a saludar a mamá y siguió su camino hacia Borronoso, en donde vive con su familia.
Nosotros como es costumbre nos juntamos en el rancho de la abuela Mamá Tita, en el encontramos a Ninito que hace un rato llegó y mientras los adultos conversan en la enramada, nosotros correteamos por el patio, hacemos piruetas, danzamos y nos hacemos dueños de la noche y construimos con la inocencia los sueños que nos permitirán sobrevivir a la vorágine del hambre.
Domingo Acevedo.
Un espacio para compartir los sueños y las esperanzas de juntos poder contruir un mundo mejor a través de la poesía.
Sueños perdidos en los conucos.
Son las seis de la tarde, detrás de la casa papá prepara su montura. Julia es una burra que nos ha acompañado en un gran trecho de nuestras vidas, ha estado ahí, en las buenas y en las malas, sobre su lomo nos ha llevado por todos los confines de esta tierra y más allá, a la ciudad en donde no hay espacio para los humildes labradores que llenos de harapos por sus calles inhóspitas vendemos nuestros sueños perdidos en los conucos y por las que pregonamos a viva voz: verduuuras, yuuuca, aguaaaaacates, maaaaangos marchanta llevo carbooon, venga marchanta que llevo huevos criollos, para después de vender nuestros productos por miserables monedas, perdernos nuevamente en el monte con todos nuestros sueños a cuesta.
Ya la montura está lista, León juguetea entre nuestras piernas alegre, salta, ladra, mientras Julia nos mira con toda su ternura resumida en sus ojos tristes. No me acuerdo cuando llegó a casa pero la recuerdo de toda la vida, desde siempre, desde que tengo uso de razón.
Estamos detrás de la casa, bajo la mata de capá, mi madre, mi hermano Juancito, y yo, Felipe y Ñonó no sé por dónde andan. Ya mí padre está preparado al lado de Julia, se despide con un gesto de la mano y se monta, yo corro y me aferro con ternura a una de sus piernas y luego me alejo para ver como él, mi padre, se aleja por el camino en sombras a un lugar perdido en el monte, Leon va tras él ladrando y saltando alegre, nosotros nos quedamos parados en medio de la noche hasta que ellos se pierden en la oscuridad.
Allá en un claro del monte mi padre tiene un horno hecho de troncos secos para hacer carbón vegetal, para luego venderlo en la ciudad. Tiene que cuidarlo, por eso es que amanece todas las noches vigilándolo para que no se incendie porque sino en vez de carbón sólo encontrará cenizas.
En la carbonera, a la intemperie dormirá sobre algunos sacos de cabuya que lo cubrirán del frío de la noche y los mosquitos, acompañado de los grillos y las estrellas, las lechuzas y los murciélagos. A su lado León gruñirá a los fantasmas que rondan la soledad de la noche en el monte, él y Julia no desampararán a mi padre por nada del mundo, estarán siempre a su lado protegiéndolo de toda maldad escondida entre el silencio nocturno y la oscuridad.
Mañana tempranito, antes que salga el sol, mi madre, Juancito y yo iremos a encontrarnos con mi padre, les llevaremos un poco de café y algo de comer ya a esa hora el carbón estará listo para llenar cuatro o cincos sacos para acomodarlos en el lomo de Julia y regresar a la casa, para de inmediato mi padre tomar el camino hacia la ciudad y venderlo a algún comerciante para traernos de comer para unos cuantos días.
Domingo Acevedo.
Domingo Acevedo.
Un espacio para compartir los sueños y las esperanzas de juntos poder contruir un mundo mejor a través de la poesía.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)