Esta familia vive en este estado de inhumanidad en
Pedernales, como ella hay muchas familias, que no tienen servicios sanitarios,
ni agua potable, ni luz eléctrica, ni acceso a los servicios deficientes del
nuestro sistema de salud, ni cuentan con una alimentación adecuada y mucho
menos de un trabajo digno.
Esta familia vive más allá de la mina de la mina de bauxita
en Pedernales perdida en el olvido y la pobreza, si que a nadie le duela sus
condiciones de inhumanidad en que viven, alguien me dijo ellos son felices así,
yo le contesté, nadie es feliz en la pobreza.
Seguimos adelante buscando otra familia cruzamos una
empalizada y un enjambre de mosquitos y cuando llegamos al lugar ya esa familia
se había mudado, solo quedaban los vestigios de su presencia en aquel lugar,
ropas tiradas por doquier, un tanque para almacenar agua, la choza semi
destruida, y parte del conuco y de árboles frutales
alrededor.
Domingo Acevedo.
Oct/15