En karate, como en las otras artes marciales, todos los caminos te llevan a un mismo lugar, tú eres quien decides, si te detienes, te desvías o sigues el camino correcto y llegas a la meta, esa meta que está más allá de conquistar medallas y trofeos, más allá de alcanzar con sacrificios la cinta negra o el grado más alto en tu estilo, esa meta está dentro ti mismo, está en haber logrado domesticar tus bajos instintos, hasta convertirte en un ser humano apacible y noble, que se inclina reverente ante los demás, ante la vida.
Dic/2025.
