Siento que haber vivido tanto, ya de por sí es un éxito rotundo, aunque no tengo riquezas que exhibir, sí tengo muchas satisfacciones acumuladas, como la de haber vivido apegado a los principios que dieron origen a mi vida e incidir positivamente en las comunidades donde me ha tocado vivir.
Al final la vida es la sumatoria de nuestros hechos, de nuestros actos, por lo que las personas nos recordarán de acuerdo a como hemos vividos.
No he sido el ser humano perfecto pero he tratado de vivir con dignidad, de acuerdo a los principios éticos y morales que mis padres me inculcaron de niño, defendiendo mi verdad y lo que creo que es justo, siendo humilde y solidario con las personas que me rodean y sobre todo levantando bien alto entre mis manos la bandera de la lucha permanente por la justicia y la libertad de mi país y los pueblos del mundo.
Guardo una enorme gratitud por mis padres, por mis hermanos, por mí familia y por los amigos y las amigas que siempre han creído en mí y han estado presentes permanentemente en mi vida.
Gracias por ser, y estar siempre presentes, no olviden que la vida es un breve suspiro que se eterniza en la presencia y el amor de las personas que amamos y nos aman
Nov/2025.
