Agencia AFP
08.07.2018
El presidente de Haití, Jovenel Moise, llamó la noche de este sábado a los manifestantes a retirarse de las calles, paralizadas por una ola de violencia desde el viernes, señalando que ya "corrigió lo que había que corregir", al referirse a la decisión de suspender el alza en los precios de los combustibles.
"Tan pronto ustedes hablaron, yo escuché. Desde que comenzaron a enviarme ese mensaje desde la tarde de ayer, yo lo recibí y corregí lo que había que corregir", dijo Moise en un mensaje a la nación transmitido por la televisión estatal.
"Ustedes que me observan esta tarde, les pido a todos: regresen a sus hogares. La policía y a justicia van a tomar el control para limpiar las calles", precisó.
CONSULADO CHILENO: "ES RECOMENDABLE MANTENERSE A RESGUARDO"
Es por esto que el Consulado de Chile en Puerto Príncipe hizo un llamado de advertencia a los chilenos que viven en Haití y a quienes tienen viajes programados al país sobre la situación que se vive, pidiendo de manera especial que no circulen por las calles y que se mantengan a resguardo:
"El Consulado de Chile en Puerto Príncipe, Haití, informa que debido al fuerte deterioro de la seguridad pública en Puerto Príncipe y otras ciudades del país, donde entre ayer y hoy se han observado fuertes disturbios y desmanes, es recomendable no circular por las calles y mantenerse a resguardo.
Si debe usted viajar en estos días, se sugiere contactar a la respectiva aerolínea, ya que algunas han suspendido sus vuelos en razón de esta situación.
Contactos:
Unidad de Emergencias (Chile): +56956189515
Consulado de Chile en Pto. Principe (Haití): +56987210564".
Unidad de Emergencias (Chile): +56956189515
Consulado de Chile en Pto. Principe (Haití): +56987210564".
"ESTADO RESPONSABLE"
Durante su discurso de unos veinte minutos, el jefe de Estado haitiano, acompañado de su esposa, no hizo anuncios importantes ante la magnitud de los daños pero envió un mensaje de apoyo a las víctimas.
"Les digo que no dirijo un Estado irresponsable: este Estado estará siempre allí frente a los responsables de estos actos porque nosotros, haitianos, tenemos gente que nos dirige", afirmó Moise.
Desde el viernes al mediodía, la capital está totalmente paralizada por la violencia: numerosos comercios fueron saqueados e incendiados. Varios vehículos han sido quemados por grupos de manifestantes que levantaron barricadas en varias avenidas, impidiendo a muchas personas regresar a sus hogares.
El viernes, al menos una persona murió tras un incidente con un grupo de manifestantes. La víctima fue linchada al intentar forzar su pasaje en una barricada. El cuerpo del hombre, un oficial asignado a la seguridad de un dirigente de un partido de oposición, fue luego incinerado en medio de la calzada.
El sábado al mediodía, un hombre joven murió a balazos en las cercanías de un supermercado que había sido tomado por asalto por la multitud, según constató un periodista de la AFP.
Debido a esta situación, el gobierno de Haití suspendió este sábado el alza de precios de los productos petroleros.
Apenas unas horas después de haber llamado a la población a que tenga "paciencia" e intentar convencerla en un discurso televisivo de la necesidad del aumento de los precios, el primer ministro Jack Guy Lafontant decidió suspender la medida "hasta nuevo aviso", según escribió en Twitter.
El viernes, el gobierno haitiano anunció un fuerte incremento de las tarifas de los carburantes en cumplimiento de un acuerdo con el FMI suscrito hace cinco meses. La decisión implicaba el aumento de la gasolina en 38%, del diésel en 47% y el del querosén en 51%.
Incluso antes del anuncio de esta medida, el primer ministro, designado en mayo de 2017, estaba en la cuerda floja, y en la cámara de Diputados, dominada por los partidarios del presidente Jovenel Moise, llegó a realizarse una sesión sobre el futuro de su gobierno.
Su súbita marcha atrás, que refuerza las críticas que se le hacen respecto a su debilidad política, podría acelerar el fin de su mandato.
ALZA INSOPORTABLE
El nuevo marco de referencia entre el FMI y Haití, firmado en febrero, implicaba el cese de la subvención pública de los productos petroleros, fuente frecuente del déficit de las cuentas públicas.
El aumento de esos productos fue considerado insoportable por la mayoría de la población de este país que enfrenta una pobreza extrema, un desempleo masivo y una inflación superior a 13% por tercer año consecutivo.
El gobierno defiende la disminución de estas subvenciones públicas porque, según asegura, privilegiaban injustamente la economía de los ciudadanos de la vecina República Dominicana, que cruzan la frontera en busca de precios más baratos de combustible.
Desde el anuncio del aumento de precios, las estaciones de servicio de las principales ciudades del país suspendieron la distribución de carburantes.