Las leyes que rigen la sociedad
dominicana han sido diseñadas para favorecer a los sectores del poder
permanente y los grupos políticos gobernantes.
Los senadores y diputados y la constitución,
así mismo como los jueces, fiscales y procuradores y la justicia son mecanismos
de impunidad que usan para avasallar y oprimir a la gente común, que no termina
de entender como esos delincuentes disfrazados de políticos comerciantes,
industriales, sacerdotes militares y policías han organizado el estado y sus
estructuras para empobrecer al pueblo y enriquecerse ellos.
Una muestra de eso son los dos no
ha lugar dictados a favor de los ladrones confesos de los recursos del estado
como son: Félix Bautista y el sindico de San Francisco y la oposición de los
industriales Y comerciantes a hacer un aumento de salario a los obreros y
trabajadores privados y los intentos de modificación del código de trabajo para
quitarles a los trabajadores sus reivindicaciones históricas, como son la modificación
de las ocho horas de trabajo a doce horas y la eliminación de la cesantía,
entre otras.
En el 50 aniversario de la revolución
de abril los dominicanos debemos reflexionar sobre la importancia de ese acontecimiento
histórico y el camino que como sociedad debemos seguir para romper con las
cadenas que nos atan a este sistema de injusticia y opresión en el que vivimos
en la Republica Dominicana.
Domingo Acevedo.
Abril/15