viernes, marzo 31, 2017

La delincuencia hay que atacarla en sus orígenes



Las personas honestas y serias ahora,  además de los delincuentes que azotan todas las regiones del país, también tendremos que cuidarnos de los policías y militares que han mandado a las calles con el supuesto propósito de combatir la delincuencias, ya que estos en vez de mantener a rayas a los delincuentes, lo que hacen es hacerle la vida imposible a las personas que se dirigen a sus trabajos con los odiosos retenes que son usados para macutear, maltratar, reprimir y hasta asesinar  a los civiles ya  que quienes dirigen estos operativos no tienen la más mínima formación humana para respetar los derechos de las personas  y se creen que el arma y el uniforme que poseen  le dan el poder de pisotear y humillar a los que por desgracia debemos salir a las calles a ganarnos la vida o hacer alguna  diligencia como es llevar los niños al colegio, ir al supermercado,visitar algún amigo etc.

Lo primero es que nos violan el derecho constitucional al libre tránsito y violan también el código penal que establece que ninguna personas puede ser detenida por simple sospecha, pero te detienen sin ninguna razón y sin ningún  tipo de cortesía.

Lo primero que  te preguntan es si tu eres militar,  parecería que los militares tienen luz roja para delinquir, ya que si eres militar te dejan ir sin requisarte, lo otro es que las personas no  tiene el derecho a  preguntar porque son detenidas, ya que eso los ofende de tal manera que se atreven a maltratarte físicamente.

Estamos jodidos no tenemos quien nos defienda, ya que estos militares y policías son los garantes del sistema de corrupción e impunidad que impera en la República Dominicana.    

Esta estrategia ha fallado en más de una ocasión y es que el problema de la delincuencia hay que atacarlo  por sus orígenes, por las causas que la origina, la corrupción estatal, la impunidad, la marginalidad, la pobreza, la falta de empleos y oportunidades entre otras cosas y no de manera superficial, primero hay que acabar  con la delincuencia arriba y luego con la de abajo.

Domingo Acevedo.
Marzo/17

Archivo del blog