La sociedad dominicana ha llegado
a un nivel tan bajo que ve con beneplácito como los funcionarios de los
gobiernos en el poder se enriquecen robándose el dinero del estado, en vez de
condenarlo, obviando de esta manera, que cuando alguien le roba al estado, se
roba el dinero que se debe invertir en salud, educación, agricultura y empleos,
entre otros servicios fundamentales para el desarrollo de una nación.
Domingo Acevedo.
Oct/13