En nuestras emisoras radiales lo que esta de
moda es la mediocridad y la vulgaridad.
Escasas son las emisoras radiales dominicanas
en las que usted puede sentarse a escuchar un programa con algún valor
educativo o escuchar buena música de grandes artistas, de esta y otras épocas.
En nuestras emisoras radiales salvo honrosas
excepciones, lo que está de moda es la vulgaridad de la música de calle, que en su pobre contenido en letras y música
lo que invita es a la violencia, al consuno de drogas narcóticas y al sexo
desenfrenado.
Esta es la música que le impone este sistema a nuestros jóvenes para alejarlos de su papel
liberador, para envolverlos en la telaraña de los vicios, la delincuencia y el
consumo de drogas.
La casi totalidad de nuestros locutores, con
una pobre preparación y un bajo nivel en cultura universal se hacen cómplices de
esta cadena de manipulación masiva que
tiene por objetivo la alineación total de nuestros jóvenes.
Un país con una juventud que no piensa, que
vive alejada de sus problemas cotidianos, es un país con pocas oportunidades de
salir adelante de desarrollarse, de
liberarse.
Se hace urgente que desde el estado se elaboren
políticas, tanto para la radio, como para la televisión para reorientar su programación
hacia el rescate de los valores históricos, culturales, éticos y morales de
nuestra nación, sí no se toman ahora esos correctivos estamos condenados a
sucumbir como nación.
Domingo Acevedo
2/9/12