sábado, marzo 16, 2019

Rachael Corrie: la vida por Palestina


Rachel Aliene Corrie nació en Olympia, sede de condado de Thurston y la capital del estado estadounidense de Washington, el 10 de abril de 1979 y fue asesinada en Palestina, mas precisamente en la Franja de Gaza el 16 de marzo de 2003.

Rachael Corrie: la vida por Palestina

Fue una activista miembro del ISM (Movimiento Internacional de Solidaridad).Estudió Ciencias Políticas en la Universidad Estatal de Evergreen.
Se unió al Movimiento de Solidaridad Internacional, una organización de resistencia directa no violenta a la ocupación israelí de las tierras palestinas. En enero de 2003 viajó junto a otros siete voluntarios británicos y estadounidenses a Gaza.
"Mi sueño es parar el hambre antes del año 2000. Mi sueño es darles una oportunidad a los pobres. Mi sueño es salvar a las 40.000 personas que mueren cada día. Mi sueño es posible y se hará realidad si todos miramos hacia el futuro".
Tenía solamente 10 años cuando Rachel Corrie expresaba así sus deseos en una jornada sobre el hambre en el mundo que se celebró en su colegio.
Desde pequeña fue consciente de que vivía en un mundo privilegiado. Años después cuando viajó a Palestina y vio lo que pasaba allí, decía que los niños americanos no podían imaginar que sucedieran cosas tan terribles a niños de otros lugares del mundo, atormentados por una guerra que hacía que un día pudiesen amanecer sin casa y al otro día sin padres.
El 25 de enero de 2003 llegó a Rafah. Como ciudadana de Estados Unidos creía que tenía una responsabilidad especial de defender a los palestinos contra armas fabricadas por su país. Creía que la presencia de "extranjeros" muy visibles podría frenar las incursiones israelíes: "El ejército israelí sabe que tendría muchas dificultades si disparase a un ciudadano americano desarmado".

En el fondo Rachel intentaba aprovecharse de lo que más odiaba: la creencia de que la vida de un ciudadano americano era más valiosa que las demás. Gran parte de su activismo en Rafah fue hacer de escudo humano: dormía en casas de familias palestinas para impedir que las demolieran, se plantaba junto a los pozos de agua para que no los destruyeran o escoltaba a los niños a la escuela. Cuando apenas llevaba unas semanas en la Franja, ya se llevó un susto con una excavadora.
Salió con unos niños al paso de un bulldozer y la pala no se detuvo: "Nos fue empujando hasta arrinconarnos contra una pared y tuvimos que saltar desde la ventana, ¿Cómo pueden actuar así unos seres humanos?". "Llevo dos semanas y una hora en Palestina y aún no encuentro palabras para describir lo que estoy viendo".
Le parecía sorprendente que los palestinos pudieran mantener alta su humanidad a pesar del horror en el que se habían convertido sus vidas y de la constante presencia de la muerte. "He descubierto una fuerza y una resistencia esenciales en los seres humanos para mantener su humanidad en las circunstancias más terribles, algo que no conocía. Creo que la palabra es dignidad".
Una noche durmió en una tienda y relata cómo un disparo la había atravesado. Sus sueños también empiezan a reflejar la violencia que siente todos los días. "He tenido pesadillas con los tanques y las excavadoras rondando nuestra casa y tú y yo estábamos dentro", le escribe a su madre. Asustada por lo que estaba pasando, Rachel habla directamente de genocidio: "Cuando todos los medios para subsistir en un redil como es Gaza, del que la gente no puede salir, son amputados, creo que a eso se le puede llamar genocidio. Quiero decirle a mi madre que estoy siendo testigo de un genocidio insidioso y crónico". "Sin ninguna duda estoy en medio de un genocidio, del que yo indirectamente también formo parte y del que mi Gobierno es responsable en gran medida".

El 16 de marzo Rachel, de 23 años había ido a Rafah para oponerse una vez más a las demoliciones. Se sentó, con su chaleco naranja frente a la casa del doctor Samir Nasrallah, cuando un bulldozer de fabricación estadounidense, conducido por un soldado israelí  la arrolló provocándole la muerte de forma inmediata. El ejército israelí afirma que la casa de Nasrallah era la entrada a uno de los túneles por los que se conecta la Franja de Gaza con territorio egipcio permitiendo la entrada de armas a territorio palestino.
Pese a esta acusación, el ejército israelí nunca pudo aportar ninguna evidencia sobre la existencia de un túnel por debajo de la casa de Nasrallah ni en los alrededores. En 2005 los padres de Corrie presentaron una demanda civil en la que acusaban al Estado de Israel de no haber llevado a cabo una investigación completa y veraz sobre el caso, afirmando que la muerte de su hija se había producido o bien intencionadamente o por la actuación negligente y temeraria de los soldados. 
En agosto de 2012, un tribunal israelí rechazó esta demanda y confirmó los resultados de la investigación militar, dictaminando que la muerte de Corrie fue un accidente del cual ella fue responsable y absolvió a las Fuerzas de Defensa de Israel de cualquier delito.
En homenaje a esta mujer, existe un barco que lleva su nombre, el MV Rachel Corrie, un buque mercante de bandera irlandesa reconvertido en barco de transporte de ayuda humanitaria a la Franja de Gaza. Este barco fue abordado en junio de 2010 durante el episodio conocido como el ataque a la "Flotilla de la Libertad".Rachel Corrie, la mujer que luchó por la justicia y contra la opresión del régimen israelí.
ANNUR

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