martes, julio 09, 2024

No nos separamos, nos independizamos.

‌Hablar de separación y no de independencia es una forma sutil de negar la grandeza de la obra liberadora de Duarte y los Trinitarios.

No nos separamos de Haití, así como los otros paises del continente se independizaron de los colonizadores Europeos,  nosotros nos  independizamos de un país que nos invadió y por veintidós años nos mantuvo subyugado.

‌Pero además, es en ese momento de nuestra historia que  nacemos como República libre e independiente, con un escudo, una bandera y un himno, es desde entonces  que somos orgullosamente Dominicanos.

‌Muchos negadores del pensamiento Duartiano quieren minimizar la epopeya llevada a cabo por los Trinitarios,  pregonando a los cuatro vientos que no nos independizamos, sino que nos separamos de Haití.

‌Y sí, nos independizamos de Haití en el 1844 y durante casi doce años tuvimos que luchar contra ellos para afianzarnos  como país soberano.

‌Fue 24 de enero de 1856  en la batalla de Sabana Larga cuando  los Dominicanos pusimos fin a las pretenciones de los haitianos de unificar la isla.

‌ Y cuando Pedro Santana y su grupo de traidores en el 1861 anexaron  el país a España, reafirmamos nuestra independencia con la restauración de la República en el 1865.

‌Los Dominicanos somos un país de hombres y mujeres valientes que hemos sellados con nuestra sangre nuestro derecho a ser libres e independientes, así lo hemos demostrado dos veces en el siglo pasado  en  el 1916 y el 1965 en la lucha  contra el invasor norteamericano.

‌Abajo los traidores y vende patria.

‌No a los naz/ionalistas.

‌vivan  Duarte y los Trinitarios.

‌Domingo Acevedo.

‌Julio/2024.



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