Profecía

Perdí tu amor hace siglo

entre la soledad muda de los libros

y las cenizas ensangrentadas

y calientes

de las batallas inacabables

de imposibles victorias

que en el fragor de las noches inciertas

azotadas por un viento lúgubre

siempre torturaron mi alma

de soldado vencido

pero a pesar de mi soledad profética

no puedo renunciar a ti

aun sabiendo que soy un hombre

marcado por la tristeza milenaria

de los milicianos que fueron a la guerra

a morir por un extraño idealismo

que los fanatizó de tal manera

que nunca alcanzaron a entender

que en esa vorágine eterna

de sangre y metralla

perdían su humanidad

y se morían lejos

en la soledad de su crueldad

consumidos por el fuego helado

de un invierno eterno

que aún guarda congelado

el rostro de miedo

de los soldados muertos

en la última batalla

de la guerra del fin del mundo

y yo que sobrevivo a los designios

me resisto a perderte

Y te busco más allá de la profecía

entre los espejos rotos

de los aposentos imaginarios

donde mi infancia

diluida entre la sangre

y los laureles

agoniza tras la ambarina

levedad de tus ojos

que me miran desde el olvido

más puro de tu alma

El amor Jose Luis Perales.

Ayer Cumplió 37 años de muerta Juana Emilia Acevedo (la abuela mama tita)

Ayer Cumplió  37 años de muerta, Juana Emilia Acevedo (la abuela mama tita)

Ayer cumplió 37 años de muerta Juana Emilia Acevedo (la abuela mama tita), ella murió de tristeza tres años después que nos quitaron la tierra que habíamos heredados de nuestros ancestros indígenas y africanos y de la que nos sentíamos orgullosos y en donde vivíamos felices, unidos por el amor fraternar a la tierra.

Hoy recuerdo con tristeza aquel amargo episodio de nuestras vidas que nos condenó a vivir acorralados contra la modernidad, que nos robó nuestra identidad, que produjo la muerte de casi todos los ancianos de nuestra familia y nos condenó a vivir distante unos de otros lejos de la alegría, lejos del amor, lejos del verde del monte, lejos de los conucos y la lluvia, lejos de  la primavera y del canto de los pájaros, lejos, muy lejos  de la felicidad de vivir juntos todos, atados al amor fraterno a la tierra, a la madre tierra.

Ese desalojo injusto, abusivo e inhumano, violatorio de todos nuestros derechos, que costó la vida a más de un habitante de aquel hermoso lugar que llamábamos la Esperilla, que prefirieron morir allí, en donde habían nacidos a irse derrotados a otros lugares lejanos y desconocidos nos marcó para toda la vida y ensombreció de tristeza nuestro futuro y nos enlutó el alma con la incertidumbre de vivir perdidos en otras tierras tan lejanas y extrañas que aun hoy después de 52 años no nos acostumbramos a ella y miramos hacia atrás con rabia e impotencia sabiendo que ya no podremos volver a ella como en otras ocasiones porque sobre la primavera construyeron una gran ciudad.

Hoy 37 años después el recuerdo de la abuela Mama Tita permanece intacto entre nosotros,  la recordamos como era, una mujer fuerte, valiente, decidida, trabajadora, humana, y solidaria, ella era nuestra guía, nuestras vidas giraba alrededor de ella, por eso con su muerte perdimos una parte importante de nosotros.

Hoy 37 años después he querido hacer este humilde homenaje, a esa gran mujer que fue mi abuela, la que forjó mi vida, la que me inculcó el amor por la tierra, por la vida por el planeta, por los demás, la que me enseñó que hay que luchar por lo que uno cree, que hay que luchar  por la justicia, por la libertad por la vida, sin importar  los sacrificios que esto conlleve.

Loor a Juana Emilia Acevedo (la abuela Mama Tita)

Domingo Acevedo.

21/6/12