lunes, junio 15, 2015

GNOMOS DEL TIEMPO



En mi memoria guardo

como un recuerdo memorable

el fuego de tu piel
que en las noches abismales
del último invierno del siglo
derritió la nieve de cien años
acumulada sobre los tejados
de las casas invisibles
que los gnomos
habitantes de los espacios
inverosímiles del tiempo
construyeron
para esconderse de la ira
de los dioses antiguos
y como evidencia del amor
guardo entre mis labios
que te nombran con ternura
el olor líquido de los residuos
de tu sexo floreciente
y para alimentar mi fantasía
busco en mis recuerdos
como tocar con mis manos
la amarilla desnudez
de tu cuerpo
que contra la luz de la luna
palidece de pasión
entre mis brazos
como una hoja trémula
que un viento oscuro
arrastra sin rumbo








Fotos tomadas de la red.

MÁS ALLÁ DE LAS CENIZAS


He seguido tus huellas más allá de las cenizas
de los últimos atardeceres del invierno
tratando de encontrarte intacta
entre mis fantasías y mis sueños
entre la arena movediza de los girasoles
que adornan los amaneceres efímeros
de una primavera congelada
tras los cristales turbios
de un sol moribundo
he viajado a través de mi propia soledad
buscándote más allá de los límites del tiempo
y entre las hojas del olvido
encontré el rastro de tu olor a bailarina
y la vaguedad a flores de tu desnudez
me llevó a través de las vitrinas
de las noches festivas de las ciudades perdidas
entre la humareda de los siglos muertos
y no encontré entre las pestañas de la distancia
a nadie que se pareciera tanto a ti
sólo tu olor azul a rocío
sólo tu encanto diluido en el mar de la nostalgia
sólo tu imagen petrificada entre los espejos
invisibles de los recuerdos más hermosos
que de ti guardo dentro de mi alma
Domingo Acevedo.
A Dulce María Romero (Kendy)




Pequeña y audaz

Ella es pequeña y audaz
Ágil y tierna
Evocadoramente tierna
como las mariposas
que en el viento viajan serenas
hacia las tardes
de los últimos días de noviembre
dos gotas de cielo en su rostro tiene
por donde asoma el mar
si la miro es una flor
si la toco es horizonte
mujer para los hombres
luna para mis ojos
y si la amo no lo sé

Domingo Acevedo.

 Foto tomada de la red.

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