Páginas

domingo, junio 15, 2025

CUANDO LA ARROGANCIA MILITAR SE CONVIERTE EN FRAGILIDAD GEOPOLÍTICA

 


1️⃣
 EL MITO DE LA INVULNERABILIDAD, REDUCIDO A ESCOMBROS

El impacto de misiles iraníes sobre el complejo militar Kirya en Tel Aviv —sede del Mando Central del Ejército y del Ministerio de Defensa israelí— no es solo un episodio bélico: es una fisura en el relato fundacional de la supremacía israelí. Golpear el “Pentágono de Israel” es, en términos geoestratégicos, una afrenta calculada al núcleo del poder coercitivo sionista. El mensaje es nítido: nadie está fuera del alcance de la historia.

2️⃣
 NETANYAHU Y LA PARADOJA DEL PODER: QUIEN BUSCA ESCALADA, DEBE SABER LEER LAS ALTURAS

El gobierno israelí lleva meses estirando la cuerda de la provocación regional: asesinatos selectivos, bombardeos extraterritoriales, amenazas abiertas. Pero la lógica del poder imperial tiene sus límites. Cuando uno gobierna convencido de que el derecho le asiste por definición, confunde disuasión con impunidad. El resultado es este: un misil en el corazón de Tel Aviv, que no solo perfora estructuras, sino certezas.

3️⃣
 DEL ESPECTÁCULO TECNOLÓGICO AL DESNUDO ESTRATÉGICO

El ataque iraní, aunque limitado en número, ha conseguido lo que decenas de campañas de propaganda no lograron: exponer la fragilidad real del aparato de seguridad israelí ante un actor estatal con capacidad balística. El sistema Cúpula de Hierro, diseñado para tranquilizar a la opinión pública internacional, ha demostrado que el blindaje perfecto no existe. Especialmente cuando se combate no contra cohetes artesanales, sino contra una arquitectura militar soberana.

4️⃣
 EL SIGNIFICADO POLÍTICO DE LA GUERRA ASIMÉTRICA ENTRE ESTADOS

Frente a quienes siguen instalados en la narrativa binaria de “Israel responde” y “Irán amenaza”, lo ocurrido obliga a replantear los marcos analíticos. Ya no se trata de ataques preventivos o represalias terroristas. Se trata de guerra entre Estados, con códigos, lógicas y consecuencias que desbordan los titulares habituales. Irán no ha disparado a civiles. Ha apuntado al cerebro operativo del adversario. Es una advertencia, pero también un parte de guerra en toda regla.

5️⃣
 LA ALTANERÍA MILITAR COMO CEGUERA ESTRATÉGICA

Desde hace meses, Netanyahu ha subordinado toda acción exterior a su necesidad de supervivencia interna. Gaza ha sido el terreno de impunidad. Siria, el laboratorio de asesinatos selectivos. Pero quien convierte la violencia en rutina política, termina creyéndose inmune a la reacción. El misil sobre Tel Aviv es, en este sentido, la respuesta más elocuente: no hay poder sin responsabilidad. Y no hay agresión sin consecuencias.

6️⃣
 NO ES UNA DERROTA TÁCTICA. ES UNA GRIETA EN LA ARQUITECTURA MORAL DEL CONFLICTO

La prensa occidental encontrará maneras de matizar el impacto, minimizar los daños, justificar lo injustificable. Pero la imagen de la Torre Marganit envuelta en humo, a pocos metros del centro de mando del Ejército israelí, ha modificado las coordenadas simbólicas del conflicto. El monopolio del ataque ha terminado. Y con él, la narrativa de un Israel eternamente asediado que solo “se defiende”.

Una civilización que basa su cohesión en la superioridad armada no puede permitirse errores de cálculo como este. Pero Netanyahu los ha cometido todos. Y ahora Tel Aviv arde, no en nombre de la defensa, sino como consecuencia de su propia arrogancia.

Desconozco la fuente, me lo enviaron por WhatsApp pero me pareció muy interesante.